martes, 13 de mayo de 2014

Fragmentándonos.

...
Ahora estamos a kilómetros de distancia, no nos reconocemos, hemos cambiado y somos otra vez unos desconocidos, no podemos reflejarnos no vemos ningún espejo y por tanto ya ni nos sentimos. Caminamos indiferentes en esta ciudad que odiamos y amamos con tanto recelo, en esta ciudad alborotada, anoréxica, inhumana.
Pero pronto, vas acercándote una vez más, vas recorriendo cada espacio que creí mío y vas consumiendo cada parte de mi alma, cada vez más rápido, cada vez más cerca ¡¡cada vez menos distancia!! Ya no hay espacio, ni siquiera otro camino: estás junto a mi boca y al sentir tu aliento caigo nuevamente destrozada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario